El auge y caída de Ron Jeremy, el rey del porno
Cada cierto tiempo, un actor que parte desde la industria del cine para adultos da el salto al cine comercial, ya sea en grandes producciones o en pequeños proyectos. Las aspiraciones de las estrellas del porno en llegar a lo más alto en el mundo del cine pasan también por demostrar su talento interpretativo. Y estaremos de acuerdo en que el porno no es precisamente el mejor lugar para demostrar lo bien que recitas a Shakespeare, o esa vena dramática tan especial que tienes. Los actores y actrices son, al final, intérpretes, y muchos han estudiado arte dramático, a pesar de terminar en el mundo del porno. Para demostrar que pueden solventar cualquier papel y que no están encasillados en un solo género (como si eso fuera malo), muchos apuestan por aventuras en el cine comercial. Las actrices son las que más intentos llevan a cabo, en el cine de terror o de comedia, con pequeños papeles donde normalmente también tiran de desnudos. Pero hay casos muy especiales.
Por ejemplo, el de Sasha Grey, una de las mayores estrellas de las dos últimas décadas, que ha aparecido en numerosa producciones comerciales. Desde Open Windows a The Girlfriend Experience, la actriz ha logrado ganarse el aplauso de la crítica por su interpretación. El caso de Grey es, sin embargo, una excepción a la norma. La mayoría de actores y actrices porno pasan sin pena ni gloria por el cine comercial, ya que intentan cambiar por completo su registro. Jenna Jameson, otro de esos mitos de la industria, lo ha intentado en varias ocasiones, dentro del cine de terror. Sus limitaciones eran más que obvias, porque además intentaba realizar un papel que, con su bagaje, quedaba casi ridículo. El truco está, tal vez, en hacer el mismo personaje en el cine comercial, solo que sin escenas de sexo. A Ron Jeremy le ha ido bastante bien de esa manera, siendo un tipo simpático e histriónico que ha aparecido en numerosas filmaciones no eróticas, demostrando su carisma y desparpajo. El que fuera rey del porno en los años 80, y una de las estrellas más icónicas de la industria, vive ahora sus peores días, en un ocaso marcado por las acusaciones de abusos que lo han llevado a la cárcel.